viernes, 26 de enero de 2018

Rafael Berrio, "Niente mi piace"


Tratar de ser nadie en la cama que yazco/ gozar de la manta sutil que me cubre

Hay días así. Cada vez que escucho esta cancion del gran Rafael Berrio pienso eso, que hay días así. Y en la suerte que se tiene al no pensar realmente que la vida es así, o al menos todo el tiempo así. El cerebro tiene eso, puertas de salida, vías de escape. Para no ver lo obvio, o saber como reinventarlo. Total, qué es la vida/ sino una liturgia que vuelve siempre al inicio. Y si, hay días así. Pero el hallazgo de Berrio es la enumeración, esa bendita enumeración, ese hallazgo de cosas mínimas y menores, que de pronto son épicas. Ante ese Niente mi piace. Berrio es un español escondido, que se nos hizo Cretino con los discos que fue sacando durante esta década, 1971 (2010) y Diarios (2013), en los que construyó una suerte de chanson hispana propia, canción tras canción con brillos fascinantes de escritura. Para su último disco --ultimo, bah, de dos años atrás-- abrazó el rock, y la verdad que logra cumbres casi loureedianas, con perdón. En los seis minutos de Mis ayeres muertos ya lo habíamos escuchado cantar eso de Todo lo he visto/ de todo me acuerdo, que es basicamente otra gran enumeración cotidiana que se apila hasta ser épica, ahora que lo pienso. Y ahora este Todo me aburre, su contracara. Sistole y diastole de un corazón de cantautor que busca y se entrega. Y que puede sonar tanto este viernes que tiene el fin de semana ahi, al alcance de la mano. O también dejar que suene el último Musica Cretina hasta que al promediar el Lado A, entre Posies y Beatles aparezca esa voz y esa guitarra, esa letra y ese estribillo. Es que, no lo podemos negar, hay días así.

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